Comer animales es malo por muchas razones. En primer lugar, nuestra salud se resiente debido a las toxinas, medicamentos y hormonas presentes en la carne. Los que comen carne tienen mayor tendencia a padecer enfermedades coronarias y a tener colesterol. En segundo lugar, una gran cantidad de tierras que se dedican a pastos se podrían dedicar al cultivo de cereales para paliar el hambre, por no hablar del metano procedente de las ventosidades de las vacas. Y en tercer lugar, los propios animales sufren a causa de la gran demanda de carne y pescado. La cría intensiva (granjas y piscifactorías) supone una mala alimentación, unas condiciones de vida insalubres, una vida corta y una muerte terrible.
En definitiva, la opción vegetariana o vegana es la mejor para el medio ambiente, para los animales y para nuestra propia salud. Y si no, que se lo pregunten a este precioso bebé.
Es un poco difícil si vives con gente omnívora y siempre has comido carne y pescado. Yo amo a los animales y me siento mal cuando pienso que me los como,pero es difícil cambiar. Si tuviera que matarlos yo mismo creo que no sería capaz.
ResponderEliminara la hora de amar a los animales no tiene nada que ver el hecho de ser o no vegetariano, en el fondo es todo una cuestion de amarlos y de quererlos
ResponderEliminarYo creo que tiene mucho que ver. Uno no se come a quienes ama. Es hipócrita decir que los corderitos y los conejos son bonitos mientras otro te hace el trabajo sucio de matarlos para que tú te los comas sin remordimientos. Por cada persona vegetariana mueren cien animales menos cada año.
ResponderEliminarQuien ama a los animales no hace distinciones. Debemos amarlos a todos y evitar que sean sacrificados con miedo y dolor para satisfacer una necesidad que puede ser satisfecha sin recurrir al asesinato.